En sus últimos años Titian pintó una serie de pinturas dedicadas a la pasión de Cristo. Estos incluyen: Coronado con Thorns (Alte Pinakothek, Munich), Mocking of Christ (Art Museum, St. Louis), Ecce Homo (The Hermitage, San Petersburgo) y dos versiones de Cristo Carrying the Cross (The Hermitage, San Petersburg y Museo del Prado, Madrid). En estas obras, impregnadas de inmenso poder dramático, las pinceladas se disuelven gradualmente en las presas de pigmento aplicadas rápidamente. El objetivo ya no es reproducir la naturaleza sino transmitir directamente la emoción cruda del pintor, que participa plenamente en el tema trágico de la imagen.